El asunto salió a luz ayer, cuando el diario bonaerense La Nación publicó varios cables del Departamento de Estado de EEUU filtrado por WikiLeaks y en uno de ellos Fernández dijo que Bolivia era un país de actitudes esquizofrénicas, Paraguay era un país de plástico y Perú era el peor de todos cuando se trata de la cocaína.
En un cable de junio de 2006, en una entrevista entre el embajador de EEUU en Argentina y José Granero, director de la Secretaría de Promoción para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), se aseguró que el entonces presidente Néstor Kirchner no iba a acceder a la petición de Evo Morales de legalizar la importación de coca y sus derivados legales a su territorio, que para hacerlo era necesario derogar una ley de 1976. El funcionario, muy amigo de Kirchner, se quejó de que el narcotráfico en Salta había aumentado desde que Morales llegó al Gobierno y que se necesitaba más control.
En octubre de 2008, Fernández se reunió con el embajador Earl Wayne. Fue en ese momento en que Fernández dijo que escuchó al presidente Evo Morales, durante un encuentro con Néstor Kichner. Señaló que, aunque Morales defiende la hoja de coca, no apoya la producción de cocaína”. Por ello, Fernández calificó las políticas de erradicación del Gobierno boliviano como ‘esquizofrénicas’.
Más duro fue con Paraguay, país al que calificó como de plástico, con instituciones que son mucho menos de lo que aparentan, donde es fácil conseguir documentos y que es fuente de muchos problemas. Lamentó, también, que su país tiene radares artesanales, lo que le impide un control adecuado del tráfico aéreo con ambos países.
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